Ene. 23 2009

Canarias abandona sus bosques submarinos

El Gobierno regional rebajará el grado de protección de las praderas subacuáticas

César-Javier Palacios [Público]

Las praderas submarinas de Canarias, uno de los principales puntos calientes de la biodiversidad marina, están en peligro. Es una categórica afirmación en la que están de acuerdo tanto las organizaciones ecologistas como los científicos, pero que rechaza de plano el Gobierno canario.

Para la Administración regional la extensión de los sebadales, como se conoce a estos bosques marinos, es el doble de lo que se pensaba. Y por eso ha decidido rebajar su rango de protección de la segunda categoría, “sensible a la alteración de su hábitat”, a la cuarta y última, “de interés especial”.

Bajo tan sorprendente desacuerdo subyacen las dificultades de políticos y empresarios para desarrollar importantes proyectos de puertos comerciales y deportivos en el Archipiélago, entorpecidos por la presencia de estas comunidades acuáticas férreamente protegidas. Así ha pasado en Lanzarote y en Fuerteventura pero, según la asociación Ben Magec-Ecologistas en Acción, ahora la auténtica razón de la pérdida de protección es la de dar luz verde definitiva a la construcción del puerto de Granadilla, en el sur de Tenerife.

Un gran polígono industrial se levanta ya en el lugar elegido para ubicar la gran infraestructura portuaria. Inicialmente, la Autoridad Portuaria y el Gobierno de Canarias afirmaron que en esa costa no había sebadales. Pero tras numerosas denuncias a Europa, ahora dicen lo contrario, que son tan extensos como vulgares. A pesar de afectar la obra a dos Lugares de Importancia Comunitaria (LIC), la Unión Europea ha dado luz verde al proyecto tras recibir unos polémicos informes del Gobierno español que justifican la intervención ante el supuesto colapso del puerto de Santa Cruz de Tenerife.

El último obstáculo

De esta forma, se superará el último escollo que le quedaba al puerto de Granadilla para comenzar a construirse: la presencia de los sebadales en el catálogo canario deespecies amenazadas.

Frente a las protestas ecologistas, sus promotores prometen medidas compensatorias “pioneras”, como el trasplante de este sebadal fuera de la zona de afección del muelle. Pero para Carlos Espinosa, portavoz en Tenerife de Ben Magec-Ecologistas en Acción, el trasplante es, además de imposible, una estupidez. “Es como si quisieran llevarse un encinar de Madrid a Dinamarca; hasta los niños entienden que algoasí no se puede hacer”.

Lo mismo opina el botánico Wolfredo Wildpret y el más de medio centenar de profesores universitarios que han firmado un manifiesto por la protección de los sebadales, en el que advierten que rebajarles la protección a estos ecosistemas es “condenarlos a la desaparición”.

Biodiversidad bajo la superficie del mar

1. Aguas limpias

Una de las funciones esenciales de estas praderas submarinas es la de depuración de las aguas gracias a su producción de oxígeno, el reciclaje de nutrientes, la prevención de la erosión o la protección de la línea costera y de las playas.

2. Guardería de peces

Reductores del efecto invernadero, los sebadales tienen también importancia para la pesca, ya que funcionan como auténticas guarderías de los alevines.

3. En regresión

Según la organización ecologista Oceana, la destrucción de estos bosques subacuáticos es superior a la de las selvas tropicales. En apenas dos décadas han desaparecido unos tres millones y medio de hectáreas, el 20% de su extensión mundial.

Deja tu comentario